El 34% de los profesionistas considera que el desarrollo constante es un estímulo laboral poderoso y la razón por la que trabajarían mucho tiempo en una empresa, de acuerdo con OCC Mundial. Para cumplir con esta demanda y evitar la rotación del personal es necesario que las compañías incorporen un plan de capacitación. 

Este es un documento donde se describe la información más relevante de una serie de capacitaciones. Incluye objetivos, presupuesto, se realiza la selección de contenidos, materiales del curso, modalidad de impartición y forma de evaluación. 

Realizar un programa de capacitación permite no sólo que el talento humano de una empresa se potencialice, sino también obtener mejores resultados, crecimiento interno y reducir la rotación laboral. Sin embargo, su elaboración puede presentar algunos desafíos.

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Desafíos de un plan de capacitación 

Este documento requiere un trabajo conjunto entre el departamento de recursos humanos y los líderes empresariales, para crear el material adecuado y acorde con el presupuesto establecido. Para que su realización no se convierta en un problema en la empresa y puedan obtenerse mayores beneficios, a continuación se describen algunos desafíos que pueden presentarse al desarrollar un plan de capacitación y cómo superarlos con un software de gestión: 

• Comunicación no asertiva 

Cuando se crea un programa de capacitación, es necesario que todas las personas que participan en ello expresen claramente sus ideas, opiniones o comentarios. Esto ayudará a que se mantengan alineados con los objetivos, los materiales por desarrollar tendrán menos modificaciones y el flujo de trabajo será óptimo. 

Para prevenir entorpecimientos de información se puede recurrir a un software de gestión, como ZEUS. Este permite entablar conversaciones directas con un colaborador o equipo de trabajo para resolver dudas u organizar actividades; además, ofrece un espacio para que cada miembro pueda solicitar o enviar documentos de manera segura. 

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• Materiales personalizados 

En ocasiones, las compañías pueden encontrar complicaciones al implementar capacitaciones porque no son realizadas o su personal las deja inconclusas, esto puede derivarse a que crean materiales generalizados y no enfocados en las necesidades o intereses de sus colaboradores. 

Para ello, los encargados de su realización deben analizar el panorama del área a capacitar para crear materiales enfocados en las habilidades o conocimientos que deben reforzarse y se desarrollen con formatos novedosos para motivar su revisión, por ejemplo, a través de vídeos cortos, cuestionarios dinámicos o actividades con ejercicios prácticos. 

Con ZEUS las compañías cuentan con un espacio para abrir canales de consulta, por medio de estos los empleados pueden compartir sus ideas, comentarios o preguntas sobre las capacitaciones y expresar qué habilidades o temas son de su interés. También permite la carga de materiales como vídeos, archivos o podcast. 

• Coordinar jornadas laborales 

Los horarios de trabajo representan otro de los desafíos para crear un plan de capacitación, ya que es complicado encontrar un espacio para asistir a un curso sin afectar las actividades regulares. Ante ello, los coordinadores pueden optar por brindarlas de manera asincrónica, es decir, brindar el material a los colaboradores y sea revisado a su ritmo, por ejemplo, en tiempos libres entre juntas de trabajo, mientras esperan el envío de un documento o al finalizar sus actividades del día. 

Por medio de ZEUS, las empresas pueden capacitar a su talento humano de esta forma para que estudien en el horario que mejor les convenga y no interrumpa sus proyectos u obligarlos a dedicar tiempo de recreación para asistir a un taller. Además, los líderes pueden revisar el avance de cada colaborador para motivarlo a finalizar el curso y conocer sus resultados. 

• Evaluación inadecuada 

Hoy en día existen muchas opciones para evaluar el éxito de una capacitación, sin embargo se debe elegir la adecuada acorde con los materiales revisados. De lo contrario, no se podrán medir efectivamente sus resultados. Por ejemplo, si el objetivo era aprender a usar un nuevo software lo recomendable sería una prueba práctica en lugar de cuestionarios. 

Por el contrario, si la capacitación permite la realización de evaluaciones con preguntas o ejercicios teóricos, ZEUS es el indicado. Ofrece un espacio al final de cada capacitación para que las empresas creen cuestionarios y evalúen al personal con tres intentos para aprobar. 

• No programar retroalimentación 

Un plan de capacitación debe contar con un espacio de apertura, tanto para los colaboradores como para los creadores del material para recibir retroalimentación. En ocasiones se puede caer en no solicitarla o brindarla, lo cual provoca que no puedan mejorar ambas partes y se entorpezcan el aprendizaje. 

Por ejemplo, si hay errores en la capacitación como material duplicado, archivos que no abren o no van acorde con las necesidades del personal, es necesario que se conozca y sólo se logrará con retroalimentación de aquellos que recibieron el material. Esto ayudará a que en futuras ocasiones su desarrollo sea más eficiente. 

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